Actualmente, ningún mercado sufre cambios tan rápidos como la industria digital. Las empresas a menudo se sienten abrumadas por la progresión tecnológica y, por lo tanto, evitan incorporar nuevas innovaciones. La visión parece estar bloqueada, ya que no tienen una perspectiva clara de cómo la integración de nuevas soluciones podría cambiar sus negocios.
Como resultado, las corporaciones no son flexibles, carecen de agilidad y sufren caídas en la producción. Sin embargo, para recuperar la perspectiva, solo la visión ya no es suficiente. Para una vista completa, la dirección no es solo de izquierda a derecha si no que tiene que moverse hacia arriba, o cuando se trata de tecnologías digitales: hacia la nube.
Las infraestructuras en la nube son las tecnologías predestinadas que permiten a las empresas mantenerse flexibles, ágiles, adaptables y, por tanto, competitivas en el mercado. Junto con servicios en la nube eficientes, agregan una dimensión completamente nueva a los entornos de TI basados en SAP que conducen a la disponibilidad de datos en toda la empresa, respuestas más rápidas entre departamentos, aumentos en la productividad y, por lo tanto, un mejor rendimiento general.